Queridos ChicoRAErs:
En este caso no sabemos cuál fue el desencadenante, pero uno de vosotros nos ha confesado, no sin cierta consternación, que encuentra grandes dificultades en distinguir entre «sino» y «si no». Y nosotros, que nos debemos a nuestros lectores y que no os juzgamos en absoluto, no íbamos a dejar esta duda sin resolver. Por muy básica que pueda parecer. Aunque tu primo de 11 años lo distinga y tú no. No pasa nada. Nosotros no juzgamos, nosotros ayudamos. Pero ahí queda.
«Sino», todo junto, puede significar dos cosas. Por un lado, y este uso no plantea problemas, «sino» puede ser un sustantivo que significa «destino», «fatalidad». Pero, seamos serios. ¿Alguien ha usado alguna vez esta palabra, más allá de esa mención de cultureta que nos marcamos cuando decimos que hemos leído Don Álvaro o la fuerza del sino -sin contar, claro está, que nos obligaron a hacerlo en el colegio-?
«Sino» también puede ser, y esta sí es importante diferenciarla, una conjunción adversativa de un uso similar al de «pero»: «No estudia, sino que trabaja»; «No iremos a la playa, sino a la montaña». Como buena adversativa, siempre requiere que haya una proposición previa. O sea, que el «sino» no puede ir al principio de la frase. Y vamos a introducir la nota british: su uso es equiparable al «but» inglés, que lo mismo te sirve para decir un «pero» como un «sino» («It's not Wednesday, but Tuesday»).
Por su parte, «si no», separadito, es una secuencia formada por la conjunción condicional y el adverbio de negación, que da lugar a una condición en negativo. Si os decimos la verdad, sentimos que os perdemos cuando usamos ciertas palabras. Vamos a ver si lo aclaramos con ejemplos: «Si no llueve, saldremos de excursión»; «No vengas si no quieres venir». Condicionamos la segunda proposición a que no se dé la primera.
¿Cuál es el truqui del almendruqui para distinguirlas sin tener que ser un experto en lógica proposicional? Muy sencillo: en el último caso, el de «si no», observaréis que siempre se puede introducir un elemento entre «si» y «no» sin que se pierda el sentido del texto: «Si (mañana) no llueve, saldremos de excursión»; «No vengas si (tú, por lo que sea) no quieres venir». Si no hay manera de meter nada ahí, no lo fuerces: estás en el primero de los casos.
Comentarios
Publicar un comentario